Había otra visita obligada en la víspera: le hemos dado al Decathlon un tute que lo hemos dejado tiritando... Ahora sí que sí. Los billetes de avión para el regreso, el coche de alquiler para la ida, los billetes de tren para llegar desde Ponferrada a Sarria, las barritas energéticas, las tiritas y el paracetamol por si acaso, el hotelito para descansar en Santiago (previo pago de su importe, ¿verdad César?)...
Nuestro viacrucis gozoso (por aquello del compostelano Monte del Gozo, que por algo recibirá ese nombre) ha empezado ya. Sólo nos queda confiar, ¿verdad Miguel?, en tener salud y buen viaje...
Seguiremos informando...